jueves, 21 de febrero de 2013

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sábado, 5 de enero de 2013

HISTORIA DE LA FILOSOFÍA

HISTORIA DE LA FILOSOFÍA

El discurso del profesor Sobrevilla esta construido sobre la base de un conjunto de parámetros total y absolutamente contradictorios que establecen, por una parte formulaciones metafísicas (ontológico, óntico; existencial - esencial) y por otra parte todos los discursos idealistas, metafísicos, incluyendo paradójicamente el discurso caricaturizado de Marx.
La precariedad de las estructuras conceptuales del profesor Sobrevilla se reflejan en que desconoce, “olvida”, “ignora” que a lo largo  de veintisiete siglos la historia de la filosofía se ha dividido en dos posiciones fundamentales, principales, esenciales. Una posición, la idealista, que se ha visto representada paradigmáticamente en pensadores que han reflejado esta postura, caracterizada por la alienación, por la mitología, por la esquizofrenia, por la irracionalidad, formulada, vgr., Platón, Tomas de Aquino, Berkeley, Hume, Kant, Hegel, Neohegelianos, Neokantianos, Fenomenología (Husserl), filosofía de la vida (Bergson), Metafísicos (Alexander, Hartman, Whitehead), Pragmatismo (James, Dewey), Existencialismo (Heidegger, Jaspers), Neotomismo, Neopositivismo (Positivismo Lógico, positivismo lingüístico, filosofía analítica), post-estructuralismo (Derrida), post-modernismo (Lyotard), Hermenéutica (Gadamer, Habermas, etc.) y otros.
La otra posición la materialista, que se ha caracterizado por la desalienación por ser antimitológica, contraria a la esquizofrenia, esencialmente racionalista, formulada por: Demócrito, Epicuro, Ockam, Hobbes, Diderot, Holbach, Feuerbach, Marx, Engels, Lenin, Mao y otros. La posición del profesor Sobrevilla, de desconocer el ABC de la historia de la filosofía, de la lucha sempiterna entre el idealismo, por una parte; y el materialismo por la otra, demuestra un problema patológico, como buen germanófilo, como buen súbdito del Tercer Reich, el profesor no puede criticar, no puede cuestionar, no puede alzar la voz en contra de los pensadores de la cultura teutona.
El trabajo de los profesores germanos de Tubinga es meritorio. Al profesor Sobrevilla le han hecho perder la brújula de la filosofía, es incapaz de establecer diferencias cuasi fisiológicas, v.g.r., el “masculino” materialismo y el “femenino” idealismo. Tenemos que recurrir a analogías de la naturaleza para que algún día reaccione en busca de su identidad, porque el desventurado se ha extraviado en las categorías teológicas del cielo (materialismo) y del infierno (idealismo). Su alma ya esta penando en el reino de las walkirias o en el de los enanos Nibelungos.
II
La falsificación, la mixtificación, y la revisión del pensamiento de Carlos Marx parte de la atribución de concepciones ajenas al discurso del genio de Treveris, formula criterios que no tienen una sustentación en la producción intelectual de Marx.
Sobrevilla se ha “inventado” un Marx de acuerdo a su gusto y capricho. Hubiera sido conveniente, necesario y objetivo señalar los contextos ideológicos en función bibliográfica y no de “supuesta autoridad”. Las aseveraciones per se – por sí solas – no dicen nada de nada, son simples especulaciones, arbitrarias y antojadizas.
1.- La primera observación establece de que: “Así, la división entre las clases piensa Marx que es un motor de la historia que se debe justamente a causas económicas” (Repensando la tradición nacional I. p. 142)
Lo que Marx y Engels han señalado en el famoso Manifiesto del Partido Comunista, de 1848: “La historia de todas las sociedades hasta nuestros días es la historia de las luchas de clases”
Hombres libres y esclavos, Patricios y Plebeyos, señores y siervos maestros y oficiales, en una palabra: opresores y oprimidos se enfrentaron siempre, mantuvieron una lucha constante, velada unas veces y otras franca y abierta; lucha que terminó siempre con la transformación revolucionaria de toda la sociedad o el hundimiento de las clases en pugna” (Marx C., Engels, F. Obras escogidas, Progreso Moscú, s/f, pp. 32, 33)
Podemos proseguir largamente con las tesis básicas, fundamentales de Marx. Relacionada con la tesis anterior en 1867, precisó que: “La violencia es la comadrona de toda sociedad vieja que lleva en su entrañas otra nueva. Es, por sí misma, una potencia económica” (El capital, T I, F.C.E. México, 1946, p. 639)
Los intelectuales filisteos siempre han recusado a la violencia. Sobrevilla no es la excepción, en este texto es ajeno al problema; pero en otros textos es un apologista  del pacifismo, de la no violencia, de condenar como un buen intelectual de estado: el terrorismo. No el terrorismo de estado sino el “terrorismo” de los de abajo, “el terrorismo popular.”
Engels en 1878 en el famosísimo “Anti - Duhring” en la sección segunda, Economía Política, en los apartados II, III y IV, bajo el rubro de “La teoría de la violencia y el poder” desarrolla la tesis de la violencia de Marx (pp. 151-178)
Dice Engels: “la violencia desempeña también otro papel en la historia, un papel revolucionario; de que, según la palabra de Marx es la comadrona de toda vieja sociedad que anda grávida de otra nueva; de que es el instrumento con el cual el movimiento social se impone y rompe formas políticas enrigidecidas y muertas” (Engels F. Anti-Duhring, Grijalbo México 1964, p. 177)
2.- El profesor Sobrevilla no solo confunde metafísicamente “división” entre las clases con la “lucha de clases”. Una cosa es “legitimar” la división social del trabajo (caso Durkheim) y otra es formular la supresión de la división del trabajo (comunismo). Una cosa es la posición racista de sustentar de que Occidente es el depositario absoluto de la racionalidad (Max Weber) y otra es señalar de que la racionalidad  se inicio en Asia, en Mesopotamia y en Egipto, con la astronomía y las matemáticas que comienzan con la explicación, con la razón, a partir no de la pura explicación sino de las necesidades de los seres humanos. (Farrington B., Ciencia Griega)
Una cosa es legitimar la delincuencia (Durkheim) y otra cosa es formular la supresión de la delincuencia (socialismo). El profesor Sobrevilla postula de que Marx establece como alternativa de que “la revolución proletaria es siempre mundial” (Repensando la tradición nacional, I, pp. 436-518)
Esta aseveración del profesor germano no la sustenta en ningún texto de Marx. Sugiere que esta tesis se inscribe en el “Manifiesto del  Partido Comunista”, pero es una estrategia mixtificadora sin sustento real. Es una tesis trotskista.
La revolución proletaria se suponía – se atribuyen los supuestos a Marx y Engels -  que debía de producirse en los países que estaban a la vanguardia del modo de producción capitalista en el siglo XIX: Inglaterra, Francia y Alemania; pero el desarrollo de la lucha de clases determinó que fuese fundamentalmente el Asia, Rusia en 1917 y China en 1949, en el contexto de los países paradigmáticos.
3.- El tercer asunto que ha generado complejas contradicciones teóricas es el de la conceptuación de ideología por parte de Marx.
El Profesor Sobrevilla señala de que “en Marx la noción de ideología no se refiere tan solo ni en primer lugar a las teorías, ni siquiera únicamente al conocimiento, sino en forma bastante más amplia a una forma de conciencia social: a la falsa conciencia social discursiva. Las funciones de la ideología son dos: sociales (por ej., consagrar los roles determinados por la división del trabajo o bloquear la toma de conciencia de la clase trabajadora) y cognoscitivas (por ej., obrar como un reflejo invertido de las relaciones sociales y enmascararlas)” (Ibid, T II, p. 770).
La tesis postulada por Sobrevilla: de que la ideología de acuerdo a Marx equivale a “falsa conciencia social discursiva”, es una tesis que ha generado una polémica infinita.
En este contexto Terry Eagleton ha hecho un conglomerado de puntualizaciones, de las cuales solo señalaremos las iníciales por razones obvias, “cuando Marx y Engels comentan en La Ideología Alemana que las ideas dominantes de cada época son las ideas de la clase dominante, probablemente consideran que esta es una observación “genética”, dando a entender que estas ideas son las realmente producidas por la clase dominante; pero es posible que solo sean ideas que están casualmente en posesión de los gobernantes, al margen de su origen. Las ideas en cuestión pueden ser verdaderas o falsas; si son falsas, puede considerarse que los son de manera contingente, o bien puede considerarse que su falsedad es un efecto de la labor funcional que desempeñan en el fomento de interés turbio, o como una suerte de marca  que contraen al esforzarse por racionalizar motivos sociales o caducos” (Eagleton, Ideología, Paidós, Barcelona, 1977, p. 70).
Eagleton insiste en la tesis de que ideología referida a su significación puede significar ideas verdaderas o falsas.
“La crítica de la ideología afirma a la vez que ciertas formas de conciencia son falsas y que esta falsedad es de algún modo estructural y necesaria respecto a un orden social especifico. La falsedad de las ideas, podríamos decir, forma parte de la “verdad” de una condición material de conjunto. Pero la teoría que identifica esta falsedad se desvanece de golpe, al denunciar una situación que simplemente por su condición de teoría, es incapaz de resolver. Es decir, la crítica de la ideología es al mismo tiempo la crítica de la crítica de la ideología. Además, no es como si la crítica ideológica propusiese incluir algo verdadero en lugar de la falsedad. En cierto sentido, esta crítica retiene algo de una estructura racionalista o de la Ilustración: la verdad, o la teoría arrojaran luz sobre las concepciones falsas. Pero esto es antirracionalista, en tanto lo que propone no es un conjunto de concepciones verdaderas sino solo la tesis de que todas las ideas, verdaderas o falsas, están basadas en la actividad social, practica y más en particular en las contradicciones que genera esta actividad” (Ibid, op. cit., pp. 103,104)
III
Las observaciones al profesor Sobrevilla constituye aspectos casi secundarios: 1. La división entre las clases – no la lucha de clases, 2. La revolución mundial, 3. La ideología como falsa conciencia.
El problema de Sobrevilla es de que como una mentalidad mínimamente infantil, ingenua, candorosa, virginal, etc., ubica a Marx con un conjunto de pensadores burgueses con los que no tiene absolutamente nada en común, ese es el problema -  no distingue la verdad de la falsedad, no diferencia lo bello de lo feo, no separa el bien del mal. El niño no ha logrado desarrollar las capacidades de análisis, síntesis, inducción, deducción, etc., no puede tener la capacidad de abstracción, de diferenciar la posición materialista de la idealista.
Es en este contexto de que Sobrevilla sostiene: “El pensamiento contemporáneo ha sido en este sentido acercando cada vez mas el espíritu a la materia  - pensamos en Marx, Freud, Nietzsche, Heidegger, Sartre, Merleau Ponty” (Repensando la tradición nacional, I, T I, p. 21)
El profesor esta formulando dos tesis. La primera, de que el pensamiento contemporáneo esta acercando el espíritu a la materia, ¿Qué es lo que quiere decir Sobrevilla? Este es un galimatías  que requiere un ocultista, o posiblemente un psíquico, un quiromántico, u cartomántico o patomántico para poder develar este ocultamiento, este texto esotérico, cabalístico, mitológico.
La segunda tesis es la que se refiere a ¿Cuál es la relación de Marx con el pansexualista Freud (debe leer a H. Wells), con el súper hombre enemigo del pueblo Nietzsche, y los existencialistas Heidegger, Sartre y Merleau Ponty.
Consideramos que es necesario y obligatorio establecer los principios fundamentales de Marx, para que no aparezcan niños encantadores de “discursos mitológicos”  que  pretenden “socializar” a materialistas e idealistas en la gran ronda del amor de los esclavos a sus amos, del amor de los siervos a los señores feudales, del amor de los proletarios a los burgueses. El niño no entiende de la lucha de clases, la criatura solo entiende del “amor” de los de arriba hacia los de abajo a través del “terrorismo de estado”, de “la criminalización de la protesta”, de la “represión institucionalizada”
Marx a lo largo de casi cuatro décadas (1844-1883) logro construir – lo que Engels señalo – la concepción materialista de la historia.
La concepción materialista de la historia se ha estructurado sobre la base de un conjunto de formulaciones teóricas referidas a:
1.- La base y la superestructura.
2.- El ser social y la conciencia social. Formas de la conciencia social: religión, moral, arte, derecho, política, educación, ciencia y filosofía (Concepción del mundo).
3.- Modo de producción: Fuerzas productivas y relaciones de producción. Principales modos de producción: comunidad primitiva, esclavismo, feudalismo, capitalismo, socialismo, comunismo.
4.- Clases sociales y lucha de clases
5.- Estado y revolución
6.- Masas, lideres y nación
En las dos ciencias sociales – cuyo status como ciencias es cuestionado por los idealistas – donde Marx descubrió dos leyes fundamentales fue en: 1. La historia a partir de la lucha de clases, y 2. La economía sobre la base de la plusvalía.
Estos aportes de Marx al pensamiento humano, expuestos por Engels en 1878 en su artículo “Carlos Marx” y en 1883 en el “Discurso ante la tumba de Marx” (Marx C., Engels. F., obras escogidas pp. 389, 391, 392, 451) configuran un pensador que no tiene nada que ver con todos los pensadores añorados, soñados, adorados, idolatrados, citados por el niñito Sobrevilla.
Marx es el materialista Marx y los otros – los otros – son los idealistas. Sobrevilla vive en un mundo de fantasías, de ilusiones, de alucinaciones, donde con su verbo mágico – exactamente metafísico – teológico -  discurre en “universos” extraterrestres, meta-galácticos, espirituosos, espirituales, metapsíquicos, ocultistas.
Es en este otro contexto que la Bibliografía reviste como siempre la primera prioridad. Debo de agradecer a muchos especialistas marxistas (más de un centenar) que con sus eruditos trabajos me han permitido aclarar, esclarecer, ratificar – civilizar – mi concepción del mundo.
Autores como Bijovski, Cornforth, Huisman, Lukacs, Schaff, Sokal, Wells, y otros han contribuido tanto en el esclarecimiento  como en el establecimiento de la verdad.
En esta bibliografía hemos actualizado la producción intelectual, en beneficio de la respetable intelligentsia lectora.
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viernes, 21 de diciembre de 2012

RED NACIONAL CIENTÍFICA es una organización de estudiantes, profesionales y público en general que trata de resolver o interpretar de manera científica los problemas sociales que se presentan en la actualidad. Cuenta como sustento científica en las bases del marxismo, lenenismo, maoismo...